lunedì 22 marzo 2010

Divagaciones

Inherente al Angelus del día 21 marzo 2010 en Roma, Ciudad del Vaticano.
 
Cuando era niña me decían que debía ser buena, caritativa y sincera, por lo contrario cuando moriría hubiese ido derechito al infierno.

Cuando ya era adolescente aprendí que a ser sinceros no conviene, a ser buenos tampoco y ni hablar de la caridad. Mis padres querían que frecuentaras solamente muchachos de buenas familias, por lo tanto estaban fuera de lista todos los emigrados, los pobres y los huérfanos.

Todas las veces que regalaba algo me decían que era boba, todas las veces que decía lo que pensaba decían que tenía una bocota.

En fin nunca se entendió que querían decir los adultos de aquella época, la mía, soy de los '60, con caridad, verdad y bondad. ¿Que ideas tenían ellos en verdad?

Mi crecer fue rodeado de racismo, oscurantismo, brutalidades, ya basta con pensar en la bomba H, un hecho histórico que no se debe olvidar. O la guerra en Vietnam, o las guerras balcánicas y Beyrut  y la masacres africanas, y ecc...ecc...

Somos hijos y nietos, en la mayoría de los casos, de gente que hasta el otro día pensaba que los africanos son sucios y miles de otros pensamientos algo por el estilo. ¡Que horror!

Somos los hijos de los que nos enseñaron a producir basura en grandes cantidades industriales, a evadir el fisco, a ignorar el vecino, a vender para ganar, no importa que o como.

El Vaticano tiene un buen por ciento de las acciones de las bananeras, hay que verlas, (no quiero comerme un solo banano más, hombres que viven como esclavos libertos en baracas de madera marchitada, sus niños con cáncer a la piel, ¿que importa mi vecino?)

Les enseñé a mis hijos que es mejor saber de donde viene un fruto o un vegetal y todo lo que comemos, no es justo hacer finta que no existe la esclavitud.

Somos responsables de nuestros actos cósmicos. Besar la mano enjoyada de alguien significa aceptar la idea de esclavizar un hombre, meterlo a trabajar bajo tierra y dormir tranquilos.

Es inaceptable el discurso del Papa, la teoría del quien no tiene pecado lance la primera piedra, violar un niño es ilegal delante de dios, si existe, y delante de todos los hombres de buena voluntad. Es evidente que tener un hombre en cautiverio genera aberraciones que hay que curar, decide la parte civil como. Aquí y ahora, se lo debemos a los niños violados.

Nessun commento:

Posta un commento